
España combina diversidad cultural y una larga tradición constructiva que se refleja directamente en su arquitectura. El país alberga escuelas influyentes, una producción teórica constante, una generación activa de arquitectos y una industria de la construcción consolidada, con sólidas capacidades en innovación, estandarización y exportación. La arquitectura española contemporánea se caracteriza por la pluralidad de enfoques y por la articulación entre la tradición material, la tecnología y el rendimiento.
En este contexto, los materiales desempeñan un papel central en la concepción, la expresión y la funcionalidad de los edificios. El acero, el vidrio, el ladrillo, la piedra y la madera siguen siendo recursos esenciales en la práctica arquitectónica, pero su papel va mucho más allá de la materia prima. Una vez procesados industrialmente, estos materiales se transforman en una amplia gama de productos y sistemas, como paneles técnicos, fachadas ventiladas, componentes estructurales, revestimientos extruidos y sistemas de brise-soleil.
Esta transformación amplía significativamente sus posibilidades de uso y de detalle, permitiendo tanto soluciones seriadas como estrategias específicas de proyecto. Un solo material, como el acero, puede generar estructuras pesadas, mallas flexibles, paneles compuestos o componentes de sombreado, cada uno con prestaciones, estéticas y requerimientos de ensamblaje distintos. Estas soluciones operan en la intersección entre diseño, industria y normativa, posibilitando que la arquitectura se adapte a diferentes escalas y programas.

Este artículo examina cómo se están utilizando estos cinco materiales en proyectos recientes construidos en España, destacando sus variaciones tecnológicas, aplicaciones arquitectónicas y vínculos con la industria local. La selección busca mostrar cómo el dominio técnico de los materiales básicos puede dar lugar a arquitecturas precisas y adaptables, en sintonía con las demandas actuales.
Acero: versatilidad y expresión técnica
Como material de producción industrial, el acero está compuesto por aleaciones metálicas que ofrecen alta resistencia mecánica, ductilidad y precisión dimensional. Su fabricación controlada y modularidad lo hacen adecuado para una amplia gama de aplicaciones constructivas, desde la ingeniería pesada, como puentes y pasarelas, hasta componentes de alta precisión en fachadas e interiores. En arquitectura, el acero se emplea ampliamente en fachadas ventiladas, sistemas de protección solar, mallas metálicas, brise-soleil móviles y detalles constructivos interiores, lo que permite ensamblajes ligeros y eficientes. Su facilidad de instalación y el alto grado de personalización favorecen soluciones versátiles, adaptables a diferentes escalas y programas.
Por ejemplo, en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo, la fachada ventilada de Stacbond, compuesta por paneles compuestos de aluminio, cumple con criterios de eficiencia térmica, durabilidad y mantenimiento. Según la descripción del proyecto: "Uno de sus avances tecnológicos es el uso de pintura prismática para cubrir grandes superficies de fachada. Esta pintura se caracteriza por su durabilidad e intensidad cromática, así como por su capacidad de cambiar de tonalidad según la luz y el ángulo de visión."

En la Universidad UDIMA, la malla metálica de Codina funciona como una piel secundaria de la fachada, filtrando la luz solar directa y contribuyendo a la ventilación pasiva y al control visual, al mismo tiempo que permite que la estructura subyacente permanezca visible.

En la renovación de la Casa Batlló, diseñada por Kengo Kuma en Barcelona, se utilizaron cortinas metálicas de KriskaDecor como elementos verticales ligeros que envuelven el atrio interior. Compuestas por cadenas de aluminio anodizado, estas superficies organizan el espacio y guían la mirada, funcionando como campos reactivos para la luz artificial. Según los arquitectos: "Imaginamos este espacio vestido con cortinas de cadenas de aluminio que, a través de su meticulosa materialidad, captan la luz como redes de pesca, revelando brillos, siluetas y sombras." La estrategia evita la introducción de materiales adicionales y transforma el volumen de la escalera en un campo perceptivo donde únicamente está presente la luz.

Vidrio: transparencia y control ambiental
Material naturalmente translúcido, el vidrio está compuesto por sílice fundida y puede incorporar aditivos, laminados o tratamientos térmicos para mejorar sus propiedades mecánicas, térmicas y ópticas. Es uno de los materiales más versátiles en la construcción contemporánea, funcionando tanto como cerramiento como mediador entre los ambientes interior y exterior. En arquitectura, el vidrio se aplica ampliamente en fachadas, cubiertas, sistemas de brise-soleil, particiones interiores y ensamblajes de protección solar. Las soluciones actuales suelen incluir marcos de aluminio con doble acristalamiento, vidrios serigrafiados, aislantes o de control solar. Su uso requiere un cuidadoso equilibrio entre transparencia, confort térmico, seguridad y eficiencia energética.
En la Clínica Ismael Oria de Jaén, el estudio Mar Masiá Atelier especificó sistemas de Strugal que integran el vidrio como parte activa de la envolvente del edificio. La solución garantiza un control adecuado de la luz natural, hermeticidad y desempeño térmico, acorde con un programa sanitario. A pesar de su transparencia, el vidrio se convierte en un elemento destacado dentro de la composición arquitectónica, contribuyendo a la claridad formal y a la atmósfera luminosa de los espacios interiores.

Ladrillo: entre tradición cerámica y sistemas industrializados
El ladrillo es uno de los materiales de construcción más antiguos y extendidos del mundo, tradicionalmente fabricado a partir de arcilla cocida. En la arquitectura contemporánea, su uso va más allá de la mampostería convencional, incorporando sistemas industrializados como revestimientos extruidos, brise-soleil modulares y fachadas cerámicas ventiladas. En la arquitectura española actual, el ladrillo y sus derivados se utilizan a menudo para recuperar la materialidad vernácula mediante soluciones técnicamente optimizadas. Sus aplicaciones van desde el revestimiento hasta el cerramiento estructural, combinando valor estético y funcional.
En la Casa para Alba y Oriol, de MP Studio, se utilizan tejas cerámicas de Tejas Borja en la cubierta inclinada, posiblemente la expresión más tradicional del material. El resultado es una composición que equilibra la herencia constructiva con el desempeño técnico.

En la Casa T, en Barcelona, se utiliza el sistema modular Flexbrick como filtro solar y capa de sombreado, reinterpretando la lógica del ladrillo artesanal desde una perspectiva industrial. La malla cerámica se integra con el entorno y permite que la arquitectura respire.

El Complejo Parroquial San Manuel González, diseñado por Ramón Fernández Alonso, emplea piezas cerámicas extruidas de Gresmanc para definir fachadas continuas y contundentes. El sistema permite una ejecución precisa y acabados homogéneos, ideal para programas religiosos que requieren sobriedad formal y solidez material. Según los autores: "La solución de fachada adoptada, utilizando una cubierta de panel sándwich como capa intermedia entre la subestructura y los elementos cerámicos, conforma toda la envolvente ventilada que unifica la imagen material del edificio."

Piedra: durabilidad y sensación de permanencia
La piedra natural es un material geológico cuyas propiedades físico-químicas varían según su formación (pizarra, granito, caliza, etc.). En la construcción, se valora por su durabilidad, bajo mantenimiento y capacidad de inercia térmica. En arquitectura, la piedra se utiliza principalmente en fachadas ventiladas, pavimentos, cubiertas inclinadas y elementos de acabado. Su uso contemporáneo suele combinar técnicas de ensamblaje tradicionales con sistemas de fijación ocultos o formatos modulares industrializados.
Un ejemplo del uso de la piedra en arquitectura es el complejo residencial para trabajadores mineros en León, diseñado por ZON-E Arquitectos, donde se seleccionó pizarra natural de CUPA Pizarras para la cubierta inclinada. El material ofrece un buen desempeño frente al clima riguroso de la región, con un impacto visual mínimo y una larga vida útil. El proyecto explora la continuidad material y su integración en el paisaje circundante.

Madera: calidez, ligereza y sostenibilidad
La madera es un material orgánico y renovable con un excelente desempeño estructural y ambiental. En sus formas industrializadas—como CLT (madera contralaminada), madera laminada o paneles técnicos—permite aplicaciones de grandes luces, fachadas vistas y ambientes interiores con control de humedad y temperatura. En los proyectos, la madera se utiliza como estructura principal, revestimiento de suelos y muros o como componente técnico en fachadas ventiladas. Su popularidad ha crecido gracias a su baja huella de carbono, desempeño térmico y atractivo sensorial.
En el Centro de Alzheimer de Barcelona se adoptó la estructura de madera maciza proporcionada por Egoin para racionalizar la construcción y mejorar el confort de los usuarios. Diseñado por GCA Architects, el proyecto explora las cualidades táctiles y térmicas de la madera en un entorno de atención de larga estancia.

En la sede de IDOM en Bilbao, los paneles técnicos de madera de Parklex Prodema conforman una fachada ventilada de bajo mantenimiento, apariencia natural y alta resistencia a la intemperie. El sistema refuerza la imagen institucional del edificio mediante claridad técnica y una expresión material refinada.

A partir de estos y otros ejemplos publicados en ArchDaily, queda claro que la arquitectura contemporánea en España aborda con cuidado la selección y aplicación de materiales. Los proyectos analizados revelan un enfoque centrado en sistemas constructivos bien resueltos que combinan desempeño técnico, racionalidad y adaptabilidad al contexto. Los cinco materiales estudiados—acero, vidrio, ladrillo, piedra y madera—demuestran cómo las decisiones constructivas influyen directamente en el comportamiento del edificio. Las empresas mencionadas, muchas de ellas apoyadas por ICEX, desempeñan un papel clave en este ecosistema, ofreciendo soluciones escalables para una amplia variedad de tipologías y programas.








